Volvamos a ORAR

En conferencias, entrenamientos y artículos anteriores (Puedes leer en esta página Siempre es un buen momento para orar) me he referido al modelo “ORAR”, el cual estructuré desde dos perspectivas incluyentes; la primera como la oportunidad de acercarse a Dios y la segunda como el actuar consecuente con esa intención espiritual, es decir, si eres empleado debes ser honesto, si eres empresario debes ser justo, si eres gobernante debes ser probo, si eres deportista debes ser ejemplo, si eres músico debes ser consagrado, si eres artista debes ser responsable, si eres padre debes ser integro, si eres hijo debes ser respetuoso y en general en cualquier rol, profesión, oficio, actividad debes cultivar tu espíritu, mantener tus principios éticos y vivir libre.

Sí, los buenos deseos, pensamientos y oraciones deben ser seguidos de la acción y es ahí cuando “ORAR” surge como un modelo que utilizado con disciplina funciona para:

• Elevar planes y proyectos a la acción y a los buenos resultados.
• Identificar el origen conductual o procedimental de cualquier tipo de falla o incidente.
• Proponer acciones preventivas.
• Establecer acciones correctivas.
• Disciplinar el descubrimiento de causas raíces correctas para implementar soluciones acertivas.

Los cuatro pasos del modelo “ORAR” son:

OBSERVAR – RAZONAR – ACTUAR – RESOLVER

OBSERVAR

Que es: Es la habilidad para revisar activamente acciones, omisiones y resultados con el propósito de emprender un camino de aprendizaje y crecimiento.

Requisito: Esta etapa requiere entender símbolos, seguir pistas, valorar datos y acatar hechos capturando y ubicando información como base para potenciar oportunidades o descubrir la causa raíz de problemas.

Premisa: “Si te concentras en el culpable, te distraes de la solución”.

Beneficios: Un proceso permanente de observación eleva los resultados obtenidos y construye mejora focalizada dentro de un ambiente de retos concertados.

RAZONAR

Que es: Es el ordenamiento mental con el cual se busca concretar ideas, reflexiones, retos,… para asegurar acertividad en la toma de decisiones y en el posterior actuar.

Requisito: Indudablemente es primordial la serenidad y a ella deben seguirle aunque no en orden de importancia: disposición para razonar, conocimiento, aptitud, capacidad analítica y mente abierta.

Premisa: “Si lo razono lo mejoro”.

Beneficios: Se encuentran razones para luego proceder consecuentemente fortaleciendo la construcción de conocimiento, asegurar el camino y elevar los resultados

ACTUAR

Que es: Dar vida a un plan, idea, sueño, propuesta o proyecto.

Requisito: Ejecutar actos naturales influenciados y enmarcados en el conocimiento.

Premisa: “Una buena reflexión debe ser seguida por una mejor acción”.

Beneficios: Logros sucesivos, rendimiento y transformación positiva a escala sistémica.

RESOLVER

Que es: Capacidad o habilidad para encontrar soluciones a problemas, dudas o dificultades.

Requisito: Mantener el enfoque en la solución, conservando una actitud ejecutiva – resolutiva sin enredarse en el apuro, dificultad o conflicto.

Premisa: “Para que la confiabilidad sea parte de una cultura, debe ser adoptada integralmente por las personas, los procesos y políticas corporativas”.

Beneficios: Deducción lógica y coherente con la realidad.

CONCLUYENDO:

Cuando se ha activado el recurso de Observación, se ha ganado capacidad para Razonar y agilidad al Actuar es necesario Resolver, concluir, cerrar, dar fin… ¿A que? A lo que va bien, a lo que no va tan bien, a las eventualidades o situaciones fuera de norma, a los problemas específicos bien sean aquellos que ocurren frecuentemente o aquellos que ya son crónicos.

Para que incorpores el modelo “ORAR” en la cultura organizacional necesitas que lo practique tanta gente como sea posible y que sea reconocido por sus contribuciones, por eso te invito a socializar y a promover desde ya esta herramienta probada en empresas a las cuales hemos entrenado transmitiéndoles las buenas practicas exploradas en nuestra Cultura Vigor Empresarial.